NUESTRA HISTORIA
Colegio El Amparo
El Colegio El Amparo se define por su vocación franciscana y mariana, guiada por los valores de humildad, solidaridad, justicia social, fraternidad, paz y servicio a la creación. Su filosofía educativa no solo busca la excelencia académica, sino también formar seres humanos responsables, comprometidos y éticos
Orígenes y Fundación (1914)
La historia del Colegio El Amparo comienza en 1914 cuando Fray Isaac María Londoño, sacerdote franciscano, funda una asociación caritativa para ayudar a los más necesitados. Gracias al apoyo de varios caleños, la asociación obtiene personería jurídica ese mismo año.
Presencia Franciscana en Colombia (1925–1930)
Durante este periodo, los Franciscanos se enfocan en obras benéficas y fundan instituciones educativas y asilos. La Asociación Caritativa conecta con esta labor, deseando colaborar con las comunidades religiosas para proyectos sociales duraderos.
Los Primeros Días: Ingenio y Vocación
Las condiciones eran precarias: sin mobiliario, sin aulas. Las hermanas improvisan bancos con ladrillos, usan escaleras como salones y comienzan enseñando lectura, escritura, corte y confección, primeros auxilios y actividades recreativas como canto y teatro.
Inauguración Oficial: 17 de marzo de 1952
Se abre formalmente la escuela primaria y el taller de bordado. La ceremonia incluyó una consagración a la Virgen y el canto del “Veni Creator”. En semanas, el número de estudiantes crece exponencialmente.
Transición y Dirección F.M.M. (1930–1952)
Varios grupos religiosos pasaron temporalmente por El Amparo. Finalmente, en 1952, las Franciscanas Misioneras de María (F.M.M.) asumen la dirección oficial del colegio, iniciando una nueva etapa de compromiso y formación.
Consolidación y Reconocimiento Oficial
En octubre de 1952, el colegio se inscribe oficialmente ante la Secretaría de Educación. La dirección de Sor Bernardita establece una relación firme con inspectores educativos y benefactores. Se firma un contrato de tres años con la Asociación Caritativa.
- Legado y Crecimiento: A partir de estos cimientos humildes, Colegio El Amparo inicia una historia sólida de formación humana y académica, manteniendo siempre sus principios fundacionales de caridad, creatividad y servicio.
